miércoles, 23 de noviembre de 2016

Buenos hábitos, bienestar seguro


HÁBITOS de vida recomendadoS

para el control de la dislipidemia


Editado por Peter Hernández, Bogotá D.C. 2016
Tecnólogo en actividad física en el Centro de formación en actividad física y cultura.
Especialización en entrenamiento físico personalizado, grupo de trabajo dislipidemia - ficha 1236151


El contenido de este artículo tratará un tema que seguro habrá escuchado antes, incluye los aspectos fundamentales que usted deberá tener en cuenta si quisiera disfrutar de un bienestar mental, físico y social a futuro, asumiendo el compromiso de cuidar y mejorar su salud, mediante los lineamientos pertinentes de un estilo de vida saludable que incluye la prevención y atención de la dislipidemia.

Hacer de la salud una prioridad para prevenir o controlar enfermedades sería una buena decisión de cara a mejorar la calidad de vida que lleva ahora. Uno de los determinantes es entonces saber cómo generar bienestar mental, si más bien usted suele mostrarse insatisfecho por sus experiencias, puede fijarse a lo que puntualmente recomienda Mireia Cabero Jounou[1], frente a los buenos hábitos, sobre prestar atención a las positividades y buscar la causa de esas emociones. Conocer dicha causa le hará tomar conciencia y poder auto-generarse más momentos de bienestar sacándole provecho a esa valiosa información.

Poniendo este hábito en curso incrementará su sensación de autonomía emocional y de seguridad, sin depender de los hechos de otras personas, incluyendo mejoras en su actitud, automotivación, responsabilidad y autoeficiencia[2].

La norteamericana Dorothy Orem, profesional de la salud[3], desarrolló la teoría del autocuidado dirigida hacia la condición vital del ser humano, tuvo en cuenta y recomendó: Mantener un balance entre el descanso y la interacción social, el requisito de asegurar la eliminación urinaria e intestinal y hacer lo posible para prevenir daños o accidentes, que son aspectos básicos para revisar a diario si desea comenzar a modificar conductas de riesgo para su salud[4].

Estos cambios ayudarán a nivelar sus hábitos hacia lo positivo, ademásbeber un vaso de agua, llevar un diario de alimentos, tomar vitaminas[5], que acumulándolos se generarán buenos resultados, documentados principalmente en las siguientes áreas:

   -Productividad 
   -Relaciones
   -Finanzas
   -Organización
   -Espiritualidad y bienestar mental
   -Salud y bienestar físico
      -Esparcimiento

Por otro lado, actuar bajo el estrés en situaciones cotidianas, como momentos de trabajo extenuante, situaciones familiares que demandan tiempo o tal vez durante los quehaceres diarios, parece ser el comportamiento más común, pero no el más efectivo, pues, esa tendencia hacia la preocupación no sólo tiene efectos psicológicos sino también manifestaciones físicas. Una de las formas más efectivas para contrarrestar los efectos perjudiciales de la tensión física por estrés se basa en plantearse el objetivo de hacer ejercicio físico durante veinte minutos por lo menos, con frecuencia mínima de tres días semanales. Recomienda Joan Borysenko que dependiendo de la condición física estos ejercicios pueden ser aeróbicos o de estiramiento[6].

    Los hábitos alimenticios son parte fundamental del buen cuidado de nuestra salud, y a menos que usted siga un plan de nutrición específico dado por su médico o nutricionista dietista, puede guiarse con los ítems que le brindo a continuación: 
   
    - Regular u omitir el consumo de cafeína.
   - Controlar el azúcar debido a su relación con la insulina y el proceso de apetito inconsciente. 
    - Reducir la ingesta de carnes grasosas, pasteles, quesos y productos lácteos debido al excedente de calorías por las grasas. 
    -Incluir el consumo de frutas frescas, verduras y cereales mejoran el transito digestivo, disminuye el colesterol y produce saciedad. Además son fuente de vitaminas antioxidantes que mejoran el rendimiento[7] (A, C y E).

Cumpliendo con estos requisitos puede proponerse ponerlos en práctica con su entorno, vinculando el bienestar con el contacto social y las relaciones interpersonales[8], con el arraigo y los contactos comunitarios, con los patrones activos de amistad y la participación social[9], con el matrimonio si comparte la idea y con la familia; con los recursos sociales[10], las relaciones positivas con los demás[11], con experiencias como la paternidad si ese es su deseo[12], y con el buen funcionamiento social[13].

Todos estos factores dan forma al bienestar social que es sencillamente «la valoración que hacemos de las circunstancias y el funcionamiento dentro de la sociedad»[14], y está compuesto de las siguientes dimensiones:

    - Integración social: Se define como la evaluación de la calidad de las relaciones que mantenemos con la sociedad y con la comunidad[15].

      - Aceptación social: Es imprescindible estar y sentirse perteneciente a un grupo, a una comunidad, pero es necesario que dicha pertenencia disfrute, al menos, de dos cualidades: confianza, y actitudes positivas hacia los otros, y de aceptación de los aspectos positivos y negativos de nuestra propia vida. 

   - Contribución social: Se refiere a las creencias en nuestra capacidad para organizar y llevar a cabo acciones, capaces de lograr determinados objetivos[16].

    - Actualización social: Esta dimensión se centra en la concepción de que la sociedad y las instituciones que la conforman son entes dinámicos, se mueven en una determinada dirección a fin de conseguir metas y objetivos de los que podemos beneficiarnos, hay que tener confianza en el progreso y en el cambio social.

    - Coherencia social: La coherencia se refiere a la capacidad que tenemos para entender su dinámica. Es la percepción de la cualidad, organización y funcionamiento del mundo social, e incluye la preocupación por enterarse de lo que ocurre en el mundo.

Es de vital importancia el compromiso que usted decida asumir con el proceso hacia la constante mejora de su salud, y que, teniendo en cuenta los lineamientos formulados, empiece por generar pequeños cambios para que poco a poco se vean reflejados los beneficios en su diario vivir.



[1] El bienestar emocional - Escrito por Mireia Cabero Jounou.
[2] La acción tutorial: su concepción y su práctica,
By Ministerio de Educación, 2006
[3] Decídete a tener una vida sana. By Carlos Diéguez
[5] Colección De Hábitos. By S.j. Scott, 2014
[6] Como Alcanzar El Bienestar Fisico y Emocional,
By Joan Borysenko, 2005.
[7] Actividad física y salud, By Sara Márquez Rosa, 2013.
[8] Erikson, 1996
[9] Allardt, 1996
[10] Veenhoven, 1994
[11] Ryff y Keyes, 1995; Keyes, Shmotkin y Ryff, 2002
[12] Ryff, Schmutte y Lee, 1996
[13] Smith et al., 1999
[14] Keyes, 1998, p. 122
[15] . Keyes, 1998, p. 122
[16].  Bandura, 1997, p. 2


Lecturas recomendadas:





Actividad física y salud, 
 By Mireia Cabero Jounou, 2016










La acción tutorial: su concepción y su práctica,  
By Ministerio de Educación, 2006











Decídete a tener una vida sana,
By Carlos Diéguez, 2016











Nutriguía: manual de nutrición clínica en atención primaria,
By Rosa María Ortega Anta, Ana María Requejo Marcos, 2006









Cómo alcanzar el bienestar físico, 
By Joan Borysenko, 2005












Actividad física y salud,







¡¡Próximo sábado, para ampliar tu conocimiento entérate sobre detalles de la nutrición en la dislipidemia!!


2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. Excelente Contribución Social.
    Importante entonces:
    Saber manejar las emociones y tensiones.
    Nutrirse optimamente.
    Desintoxicar el cuerpo promoviendo su correcto funcionamiento.
    Utilizar en provecho la energía que da la alimentación, para movilizar y fortalecer la gran máquina humana.

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